Comienzo de temporada para los Dragones Celestes, que con un Tierra de Campeones sin nada que envidiar a los estadios de Copa América(?), enfrentaron a Deportes Antofagasta en un encuentro válido por la primera fecha de Copa Chile. Deportes Iquique lo ganaba por 3-0 con dos goles de Manuel Villalobos y uno de Mathias Riquero, pero no contaba con la astucia ni reacción de la visita, que en la agonía logró robarnos un empate.
En esta nueva aventura, Nelson Acosta mandó a la cancha el siguiente equipo: Rodrigo Naranjo, en portería; Francisco Bahamondes, Tomás Charles, Cristián Oviedo y Misaél Dávila, en la defensa; Mathias Riquero, Rafaél Caroca, Jonathan Rebolledo y Luis Gonzalo Bustamante, en el medio campo; dejando en ofensiva a Cristián Bogado y Manuel Villalobos.
Los primeros minutos del partido tenían a un Deportes Iquique muy impreciso, y Antofagasta tratando de ponerse en ventaja rápidamente. Ya pasados los 10′, el Dragón empezó a llegar al arco defendido por Dituro. Primero con un tremendo remate de Villalobos al travesaño y bien seguido, un intento de Bogado que se fue apenas desviado. Justamente esa fue la única jugada de riesgo del «Torito», quien lamentablemente tuvo que salir por lesión a los 20 minutos, siendo reemplazado por Carlos Soza. Ya llegando a la media hora de juego, cayó la primera celebración para los Dragones Celestes. Manuel Villalobos le gana en la salida a Dituro y marca el 1-0. Y por poco, Soza nos pone en ventaja con el segundo, pero esta vez Dituro estuvo más atento y evitó la conquista.
Ya en el segundo tiempo, Deportes Iquique mostró su mejor y peor cara. Ya que antes de los 60′, se ponía en ventaja por tres goles a cero. Primero, Mathias Riquero vencía a Dituro con un cabezazo, y más tarde, Manuel Villalobos hacía el segundo personal tras una buena jugada colectiva de los Dragones. Lamentablemente, el empuje llegó solo hasta el tercer gol y el Dragón empezó a dejar crecer a los visitantes. Primero, Renato Ramos define con un globito a la salida de Rodrigo Naranjo (69′). Más tarde, Marcos Aguirre saca un «gol de otro partido» tras entrar al área y poner el balón en el ángulo (75′). Y la amarga guinda de la torta vino en los descuentos, cuando el árbitro cobra penal para la visita tras una mano de Oviedo. Renato Ramos es el encargado de ejecutar, poniendo las cosas 3-3 con un remate que engañó a Naranjo.
Fin del partido y ambos equipos reparten puntos. Lo que pudo ser una goleada tranquilamente se nos escapó de las manos, ante un equipo que no dejó de luchar hasta el final. Un llamado de atención para el equipo, ya que estas cosas deben corregirse a tiempo para que no se vuelvan a repetir en instancias más decisivas. Tibio debut por Copa Chile, donde ahora tenemos que recibir a San Marcos el domingo a las 16 horas. Duelo de necesitados, y donde esperamos se haga presente la eterna paternidad que mantenemos sobre nuestros vecinos. Hijos nuestros nacieron, hijos nuestros morirán.
